IRIDESIO –
Los colores creados por los pigmentos nacarados provienen de finos recubrimientos de dióxido de titanio (TiO2) sobre un sustrato en forma de lámina. El grosor de las capas de dióxido de titanio se controla estrictamente para crear lo que se denomina colores de interferencia.
Los colores de interferencia pueden lograr todos los colores del arcoíris, con cada pigmento individual teniendo un color de reflexión característico en el ángulo espectral. Es el resultado de un efecto óptico causado por la interferencia constructiva o destructiva de la luz.